7 de febrero de 2010

Razones nos sobran. Tiempo nos falta. Pero, ¿y qué?


Toc, Toc, ¿hay alguien aquí?


Me encantaría salir a la calle, con una venda en los ojos y que nadie me atropellara en el intento. El único momento que disfruto es cuando me dispongo a cruzar el paso de peatones, me siento con una dosis excesiva de libertad, al dar un paso al frente y tener preferencia, aunque un día de estos como siga así, la preferencia me la van a meter por donde yo me se, hablando mal y pronto.

Ahora es cuando puedo decir, que vengan y me esposen ( me lo imagino, y tiene su "aquel..." )
Las personas con uniforme ganan, ganan y mucho. Si, un buen sueldo me refiero.


Bueno, tan solo dejar constancia de aquí empieza a desilarse un ovillo de lana, nosotros seremos los gatitos que juegan con él, en nuestras zarpas esta el seguir tirando o no.



Un beso a 1100 años luz.

Meissa.

5 comentarios:

  1. Oh! tan tú al cruzar la carretera y lanzarte a los brazos de la muerte, que nunca llega a alcanzarte, dejando que los demás casi podamos tocar la adrenalina que desprendes.

    Esta, tu primera entrada, es solo el principio de una larga historia, el hilo que nos guiará por nuestra vida, y esto formará parte de ella siempre.

    te quiero, nadie :)

    ResponderEliminar
  2. Me abalanzaré a sus brazos, si ella me lo permite.De ser asi, el mundo seguirá su ritmo.

    Pero por ahora, seguire deshilando este hilo.

    Ser responsable no figura en ninguno de mis documentos.

    ResponderEliminar
  3. Mirar a vuestras espaldas.

    ResponderEliminar
  4. No veo más que sombras en movimiento, recuerdos de lo que alguna vez han sido personas y se han perdido en el camino.

    ResponderEliminar